MENSAJE SEMANAL: Uniéndonos en el Día de Acción de Gracias
Comentarios del Presidente Barack Obama
Mensaje semanal
La Casa Blanca
24 de noviembre de 2016
Hola a todos. Les deseo un feliz Día de Acción de Gracias en nombre de la familia Obama – Michelle, Malia, Sasha, Abuela, Bo y Sunny. Como muchos de ustedes, pasaremos el día con amigos y familia, pavo y touchdowns. Daremos las gracias por tenernos los unos a los otros, y por todo lo que Dios nos ha dado. Y reflexionaremos sobre lo que realmente nos une como estadounidenses.
Esto nunca ha sido tan importante. Como país, acabamos de salir de una temporada de campaña ruidosa, apasionada y, a veces, divisiva. Después de todo, las elecciones frecuentemente donde enfatizamos lo que nos diferencia. Nos enfrentamos en una contienda de “nosotros” contra “ellos.” Nos enfocamos en el candidato que apoyamos en lugar de algunos de los ideales que compartimos.
Pero unas pocas semanas después, el Día de Acción de Gracias nos recuerda que sin importar nuestras diferencias, seguimos siendo un pueblo, parte de algo más grande que nosotros mismos. Somos comunidades que avanzamos juntas. Somos vecinos que nos cuidamos los unos a los otros, especialmente a aquellos más desafortunados entre nosotros. Siempre seremos, simplemente, estadounidenses.
Por eso, durante la confusión de la Guerra Civil, el Presidente Lincoln vio lo que más importaba – las verdades inalienables por las que tantos dieron sus vidas y que hicieron posible “un nuevo nacimiento de la libertad.” Y así precisamente cuando el destino de la Unión pendía en el balance, él proclamo audazmente un día de Acción de Gracias, un día cuando las cosas más preciadas de esta nación “deben ser reconocidas con solemnidad, reverencia y gratitud, con un solo corazón y una sola voz por todo el pueblo estadounidense.”
Hoy, continuamos agradecidos por esas bendiciones, y por todos aquellos que aseguraron que ellos serían nuestra herencia. Recordamos a los patriotas determinados que llegaron al borde del mundo en busca de la libertad. Les agradecemos a los valientes hombres y mujeres que defienden esta libertad en todos los rincones del mundo. Y honramos a todas las personas – desde los primeros estadounidenses hasta nuestros recién llegados- que siguen dando forma a la historia de nuestra nación, enriqueciendo nuestro patrimonio y dando sentido a nuestros valores fundacionales, valores que nunca debemos dar por sentados. Que en los Estados Unidos, no estamos unidos por una sola raza o religión, sino más bien unidos por una creencia común – que todos nosotros somos creados iguales. Que podemos pensar, adorar, y hablar, y amar como queramos. Que el privilegio de la democracia es nuestra, y solo nuestra, para fortalecer y proteger.
No lo pongan nunca en duda, esto es lo que nos hace estadounidenses – no de dónde venimos, como nos vemos o qué fe practicamos, sino los ideales a los que prometemos nuestra lealtad. Se trata de nuestra habilidad para vivir en conformidad con el credo tan antiguo como nuestra fundación: “E Pluribus Unum” – que de muchos, somos uno. Y mientras continuemos aceptando las contribuciones de todas las personas, siempre y cuando nos apoyemos el uno al otro, defendamos lo que es correcto y permanezcamos fieles a estos ideales – no solo cuando sea fácil, sino cuando sea difícil – entonces nadie podrá arrebatarnos nuestra libertad. Nuestros mejores días siempre estarán adelante. Y seguiremos creando un futuro donde todos nuestros hijos conozcan la promesa de los Estados Unidos.
Feliz Día de Acción de Gracias a todos.