Checklist Primary Points:
Prevenir el uso de las drogas a través de la educación antes de que éste comience
Aumentar el acceso al tratamiento para los americanos que luchan contra la adicción
Reformar nuestro sistema de justicia penal
Apoyo a americanos en recuperación
Checklist Descriptions:
Prevenir el uso de las drogas antes de que comience es más eficiente en costos y tiene sentido común. Mediante la prevención, capacitamos a los adolescentes a tener mejor rendimiento escolar, hacemos más seguras nuestras carreteras al reducir la conducción de vehículos bajo el efecto de las drogas e incrementamos la productividad en nuestros sitios de trabajo.<br /><br />
Prevenir el uso de las drogas también reduce las tasas de transmisión del virus del SIDA al reducir el uso de drogas inyectadas, crea ambientes domésticos más seguros para los niños y revitaliza los vecindarios. En pocas palabras, la prevención del uso de las drogas salva vidas y reduce costos.
El 10 de abril de 2013, el Presidente solicitó un incremento de $1.4 mil millones en fondos para programas de tratamiento, el incremento más grande solicitado en dos décadas. <br /><br />
Para millones de americanos, el uso de sustancias progresa hasta un punto en el cual los esfuerzos para el individuo, y para su familia y amigos, podrían ya no ser suficientes para controlar el problema. En esos casos, el tratamiento para la adicción podría ser un recurso crucial, incluso para salvar vidas.<br />
Al igual que en otras enfermedades crónicas, la adicción puede manejarse satisfactoriamente. El tratamiento eficaz permite a la persona contrarrestar los fuertes efectos que la adicción causa al cerebro y volver a tomar el control de su vida. Esto también tiene sentido desde el punto de vista económico: por cada dólar que gastemos en tratamiento, nos ahorraremos cuatro dólares en costos de atención médica y siete dólares en costos de seguridad pública.
Durante los últimos 25 años, las población penitenciaria en los EE.UU. alcanzó su cifra más alta y se duplicó el número de personas bajo los sistemas de libertad vigilada y libertad condicional. En 2009, cerca de siete millones de personas estuvieron bajo la supervisión de los sistemas de justicia penal estatales y federales. Cerca de nueve millones de esas personas fueron a prisión, mientras que los cinco millones restantes estuvieron bajo los sistemas de libertad vigilada y condicional. Desafortunadamente, muchas personas con cargos por crímenes relacionados con las drogas con frecuencia están enfermas, padeciendo de desórdenes subyacentes a causa del uso de sustancias. Muchas de estas personas no necesitan ir a prisión. Necesitan tratamiento, y merecen una oportunidad para recuperarse y cambiar sus vidas.<br /><br />
Es por eso que esta Administración trabaja para expandir programas innovadores como los tribunales especializados en drogas que desvían de la prisión hacia el tratamiento a más de 100,000 transgresores no violentos. Para alcanzar una reforma duradera a la justicia penal, debemos continuamente buscar formas para cambiar la "mano dura contra el crimen" en "inteligencia contra el crimen."
Más de 20 millones de americanos han hecho una jornada satisfactoria de la adicción a la recuperación. Para muchos, esa jornada dio inicio por medio de programas de tratamiento seculares o basados en la fe. Otros encontraron el camino hacia la recuperación a través de tratamientos apoyados por medicamentos o por medio de la ayuda mutua sin tratamiento. Sus historias demuestran que hay esperanza para todos los americanos adictos, y que la recuperación no solo es posible, sino que es una fuerza positiva que transforma individuos, familias y comunidades. <br /><br />Estamos comprometidos a esparcir la promesa de la recuperación a toda la nación. Como parte de este esfuerzo, la Administración Obama ha establecido la primera oficina de ONDCP (Oficina de la Política Nacional para el Control de las Drogas) dedicada a apoyar a los americanos en recuperación del abuso de las drogas y el alcohol.